Según Luis Rodríguez Neila, los juegos en la Naturaleza se clasifican en:
A. Juegos de presentación: Están pensados, sobre todo, para cuando nos encontramos con un grupo
donde no se conocen entre sí, y queremos presentarnos y conocernos,
dentro de un ambiente natural, de una forma lúdica.
B. Juegos de contacto y observación del entorno: Son los más instructivos, los que nos hacen observar y conocer la
naturaleza, a veces desde perspectivas y sentidos inusuales. La mayoría
son juegos tranquilos, que requieren receptividad y sosiego por parte del
grupo.
C. Juegos de simulación: Son juegos con movimiento, en los que “simulamos” ser animales u
otros elementos naturales. Aunque tienen un gran componente lúdico,
nos ayudan a comprender dinámicas y fenómenos de la naturaleza: las
relaciones entre los depredadores y las presas, el equilibrio natural, los
diferentes seres vivos que existen, etc.
D. Juegos de movimiento y esparcimiento: En éstos predomina el movimiento y el carácter de “juego”, lo cual no
quita que, a posteriori, podamos usarlos para hacer reflexiones sobre el
desarrollo de los mismos. Una buena parte se pueden realizar con grupos
algo más numerosos.
E. Juegos de habilidad: Son juegos en los que usamos elementos naturales (piedras, palos...)
para demostrar y ejercitar nuestras habilidades. Predominan los juegos
tranquilos y de pequeño grupo.